sábado, 28 de julio de 2012

LA LLORA


Tradición popular 
El baile de La Llora, es una manifestación folklórica del valle central de Aragua; una especie de suite musical criolla con danza, el cual tiene dos círculos o áreas: uno, reservado para los músicos dotados de carángano, bandolina, guitarra, cuatro y cantadores tocando maracas, otro, el más grande de los círculos, es para los bailadores.

Los hombres visten camisa y pantalón blanco, pañuelo de color rojo al cuello, sombrero y alpargatas, mientras que las mujeres lucen falda ancha floreada con blusa blanca, manga tres cuarto con abundante faralao y una flor de cayena en la cabeza.

Con respecto a la danza, es una mezcla de joropo, vals, merengue y golpe formada por seis piezas: La Sambainina, La Vaca, El Oso, La Chispa, El San Juan y La Magdalena y El Palito, aunque específicamente en Zuata, se le agrega una séptima pieza llamada Aguacerito de Dios, la cual, según algunos investigadores, no es más que la réplica del descanso de los bailadores mientras ingerían bebidas espirituosas al ritmo de la música venezolana.
 
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Su origen no está claro, el hecho de bailar en forma circular, alrededor de un árbol y el grito guerrero indígena indicando el final de cada acto presume su origen en las tradiciones aborígenes, que más tarde con el proceso del mestizaje y sincretismo fue adquiriendo nuevas formas.Los instrumentos de La Llora son: cuatro, guitarra, contrabajo, maracas, tambor, mandolina y carángano.La coreografía se organiza alrededor de dos círculos, en el interno se colocan los músicos y cantadores y en el externo van los bailadores.La música se inicia con La Sambainina que es un joropo valseado, luego la Vaca donde el hombre torea a la mujer, posteriormente el Oso donde los bailadores hacen gestos que imitan el caminar de un oso, seguidamente se canta la Chispa donde el hombre esta borracho y se abraza a la mujer par no caerse; luego San Juan y la Magdalena, ahí la mujer va adelante y su pareja detrás utilizando el sombrero como una aureola; los participantes van uno tras otro en forma circular, el final es el Palito palo donde en una de sus partes el cantador dice” tranca el palo María Antonia” donde las parejas tratan de tumbarse unas a otras

El Paloteo


El paloteo es un baile popular que fue muy conocido en antaño en la ciudad. Es un baile patrimonial protegido por un grupo familiar que por su no ejecución ha perdido el caracter tradicional, sin embargo figura dentro de los registros históricos de San Fernando. En diversas oportunidades se ha intentado rescatar este baile que identificó a la ciudad por mucho tiempo, sin embargo, por el propio celo y resguardo que la familia tiene de él no ha sido posible su nueva ejecución. El paloteo representaba una batalla dónde los indios protegían sus tierras de los colonizadores españoles.2

Influencias
El Paloteo es una danza-teatro sobre la que como muchas otras manifestaciones culturales se desconoce la fecha exacta en la que comenzó a desarrollarse. A pesar de no existir documentación o reseña alguna sobre la danza, se conoce que esta manifestación proviene de tierras lejanas, como es el caso de México, y que representaba una batalla entre los indígenas aztecas para proteger sus tierras de los soldados españoles en tiempos de la colonización. Se marca el enfrentamiento entre el Rey Montezuma y el soldado español Valencey.
El nombre paloteo, le fue otorgado debido a que se ejecuta utilizando unos palos cuyo golpeteo produce un sonido que hace que el baile tome un ritmo específico.
Para remontar sus inicios en el país, Gregoria Reyes, una de las alumnas de la profesora Mendoza, comentó que “El Paloteo es una danza que se dio en Venezuela en los Llanos apureños, específicamente en San Fernando de Apure, esta manifestación cultural se da en Ciudad Bolívar y en Guasipati, no existe una fecha o documentación que certifique el origen de la tradición”.
Para el proceso de obtención de datos inherentes a la investigación, fue necesario el traslado de los jóvenes hasta la capital del estado para conversar con cronistas y cultores, puesto que son ellos, al final de cuentas, quienes manejan la información sobre esta danza y sinfín de temas.
“Nos fuimos hasta Ciudad Bolívar, para conversar con cronistas de la región quienes nos aportaron datos valiosos para nuestro trabajo, pues no existen documentos que certifiquen o avalen la danza que estamos tratando”, expresó Miguel Márquez, quien también formó parte de la muestra que se realizó la tarde del pasado lunes.

Locos de San Fernando

Locos de San Fernando es una manifestación popular ancestral de la ciudad sin datación ni creador comprobados. Estos "locos" son hombres y mujeres disfrazados grotescamente de mamarrachos o indigentes, con la cara cubierta con una máscara de cartón. Suelen los hombres vestirse de mujer y las mujeres de hombre. Ellos forman grupos que salen en comparsas a recorrer calles y avenidas de la ciudad, acompañados de un cuatro y otros instrumentos de percusión originales o improvisados. En el grupo de locos siempre hay algún cantante o alguien que simule serlo, sin importar su vocalización. La tradición dicta que los locos se acercan a las casas y negocios para cantar y asustar a los niños y a cambio esperan recibir algún obsequio, bien sea dinero, alimentos, bebidas o cualquier otro objeto que para el grupo represente valor.
Los Locos de San Fernando se manifiestan cada 28 de diciembre, en oportunidad del Día de los Santos Inocentes que recuerda el infanticidio ordenado por el Rey Herodes, según narra la Santa Biblia.
Esta manifestación desapareció de la ciudad durante muchos años. A raíz de la creación de Calendas de San Fernando, la Fundación Calendas de San Fernando inició actividades de rescate de ella en 1999, haciendo un recorrido por la Av. Primero de Mayo, Av. Carabobo, Paseo Libertador y calles del centro de la ciudad. Posteriormente, se han evidenciado nuevas comparsas de locos independientes de la referida fundación que salen desde diversos puntos de la ciudad, lo que muestra un vivo renacimiento de la tradición.


Diablos de Yare

Típica Máscara de los Diablos de Yare.
Los Diablos danzantes de Yare son una festividad religiosa que se celebra en San Francisco de YareEstado Miranda (Venezuela), el día de Corpus Christi, llevada a cabo por las "Sociedades del Santísimo".
Su origen se remonta al Siglo XVIII, siendo esta la hermandad más antigua del continente Americano. La fraternidad de diablos esta dividida en un orden jerárquico, representado en sus máscaras.
Cada Jueves de Corpus Christi (9 Jueves después del Jueves Santo) se hace una danza ritual de los llamados diablos danzantes, los cuales visten trajes coloridos (Normalmente completamente de rojo), capas y máscaras de apariencia grotesca, además de adornos como cruces, escapularios, rosarios y otros amuletos.
Los Diablos danzan al son del repique de la caja, un tambor típico. Bailan por las calles del pueblo para luego arrodillarse al unísono frente a la iglesia, permaneciendo postrados en señal de respeto al Santísimo mientras el sacerdote los bendice.
La música y el baile continúan mientras los Diablos -quienes pagan una promesa religiosa al convertirse en demonios de rojas vestiduras y coloridas máscaras- visitan las casas de algunos Diablos difuntos. La celebración termina cuando al final de la tarde suenan las campanas de la iglesia y la hermandad se dispersa hasta el próximo año, cuando volverán a representar este rito donde el bien debe prevalecer sobre el mal.

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En esta festividad folklórica se rinde devoción al Santo Patrono San Francisco de Padua, al Santísimo Sacramento y a Jesucristo. La celebración comienza el martes donde se cantan fulías, se recitan décimas y se rezan rosarios y salves hasta el amanecer. Al día siguiente -jueves de Corpus- los promeseros vestidos de diablos realizan danzas alrededor y se ubican frente a la iglesia.La Procesión

Una vez en la iglesia es cuando se establece una especie de lucha entre los diablos y la custodia. Finalmente, los diablos se rinden ante el Santísimo y se arrodillan en señal de sumisión, de esta forma representan la victoria del bien sobre el mal. Los diablos recorren las calles, vestidos de rojo y con máscaras, bailando al ritmo de un corrío y ya cuando están ante el altar o se rinden en señal de respeto, bailan a ritmo de bamba, que es un toque más reverencial y tambores .

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Participación de la mujer en la Diablada

La mujer oye la misa como lo hacen los Diablos, además va a todos los sitios con ellos, se encarga de darles agua, comida, cuidar a los niños y no bailan por las calles con máscaras sino en una casa donde piden prestada una máscara y bailan al frente del altar por una promesa. Todas las promeseras visten faldas rojas y cotas blancas. En la cabeza llevan un pañuelo rojo o blanco. La Capataz es la máxima autoridad en cuanto a las mujeres, viste totalmente de rojo y sin máscara.

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Fiestas similares

Además de los Diablos de Yare existen otros como los Diablos de Naiguatá y los Diablos de Chuao. y su vestimenta es o son colores muy alegres como el rojo, el negro, amarillo entre otros. También usan máscaras bastante coloridas y es un día de fiesta muy alegre.

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Vestimenta

Camisa, pantalón y medias rojas, máscara y alpargatas. Llevan una cruz de palma bendita, el rosario y la medalla del Santísimo, que por ser difícil de conseguir se sustituye por otra medalla de una imagen religiosa cristiana. Llevan en una mano una maraca en forma de diablo y en la otra un látigo.




viernes, 27 de julio de 2012


cojedes:

DIABLOS DANZANTES DE TINAQUILLO

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Los Diablos Danzantes de Tinaquillo representan una agrupación religiosa cultural, tradicional del pueblo en el Estado Cojedes.
Esta Agrupación cumple con la manifestación religiosa que se muestra básicamente en la fiesta de Corpus Cristo, el noveno jueves después del Jueves Santo, y el día de San Juan Bautista, el 24 de junio de cada año; además de cumplir con una parte tradicional de 7 salidas o trochas cada año, como pago de promesas de aquellas personas que establecen tal compromiso, el cual se debe llevar a cabo durante 7 años en forma ininterrumpida.



Fecha de Fundación y Desarrollo Histórico de los Diablos de Tinaquillo

Citar una fecha exacta de la conformación del primer grupo de Diablos de Tinaquillo es una tarea complicada ya que no existen testimonios escritos de la misma, lo que si se puede asegurar en forma aproximada, considerando algunos relatos de personas de la población, es que a finales del siglo pasado ya existía un grupo de personas que se dedicaban a esta actividad en forma parcial.
Otro aspecto que no se ha aclarado totalmente es como, quien y de donde se trajo la idea de crear una manifestación de esta naturaleza; una serie de razones como:
Similitud en la Vestimenta, parecido en las mascaras, ciertos parecidos en los pasos de las danzas y tonada del cuatro; la cercanía de las poblaciones y los lazos afectivos entre ambas; Nos inducen a pensar en los Diablos de Guacara como los poseedores de nuestras raíces. Debemos acotar que ellos tienen una tradición, aunque interrumpida, de más de 200 años.
Tenemos que resaltar un hecho de trascendental importancia, y es que independientemente de donde sea el origen, las personas que se encargaron de darle cuerpo a esta idea, utilizaron al máximo la creatividad para conjugar una serie de elementos tanto Españoles como Africanos, Indígenas y propios de la manifestación con características propias sin prescindir de lo sagrado y religioso.
Es a principio de este siglo; 1.920 cuando esta manifestación toma mayor relevancia, guiados de la mano del señor Luis Roche y una serie de personas, en las que se encontraban: Virgilio Valera, Melquíades Valera, Dimas Aponte, El Negro Castellano, José Betancourt, entre otros, se encargaron de dar a conocer, no solamente en Tinaquillo sino además en otras regiones aledañas, dicha manifestación y esta pasa a formar parte de la identidad del pueblo.
De esta fase en adelante la historia de los diablos de Tinaquillo se puede decir que se ha dividido en etapas enmarcadas por sus capataces.
Al producirse la muerte del Sr. Roche en el año 1935, tomo la rienda del grupo como capataz el señor Virgilio Valera; al grupo encabezado por dicha persona le toca tomar una decisión que cambiara para el resto de los tiempos hasta el presente la forma en las vestimentas, ellos basados en la palabra que en vida pronunciara el señor Luis Roche, sobre el hecho de no dejar perder la tradición, se encontraron en un serio dilema: salir a bailar con los trajes estampados estando de lutos o dejar de bailar en señal de respeto, la decisión trascendental fue la de salir a bailar y cumplir con la tradición, pero cambiando la coloración de los trajes de estampados a Negro y Rojo (Negro en señal de luto y Rojo para mantener la vistosidad en la vestimenta).
La presencia del Sr. Valera como capataz de los Diablos fue corta, se estima que su permanencia fue de aproximadamente 10 años, se puede decir que con la salida de este señor se cierra la segunda etapa de los diablos, dándole paso a la tercera generación.
En el año 1.945, con la salida del Sr. Valera toma las riendas de la agrupación el Señor Dimas Aponte; con él se suman como integrantes, las siguientes personas: Juan Flores, Pablo Flores, Félix Acuña, tito Machado (cuatrista), Feliz Monsalve, Virgilio Franco, Emiliano Reyes, Ramón Pérez, Mariano Peralta, José Camacho, José L. Cabrera.
En esta etapa se acentúa la participación de la manifestación y se exploran nuevos lugares de proyección como: El Paó, El Baúl, San Carlos, Tinaco, Guacara, Yagua, etc.
El señor, Dimas Aponte se mantuvo como capataz durante aproximadamente 15 años, siendo separado de ese rango, por voluntad del resto de los integrantes, en al población de Yagua Estado Carabobo, en el año 1.960, aquí se cumple la tercera etapa dando paso a la cuarta generación. Con la salida abrupta de! Señor, Dimas Aponte se decide nombrar capataz al Señor Ramón Pérez, a quien lo secunda el Sr. Mariano Peralta En esta etapa se suman las siguientes personas José Aponte, Víctor Aponte, Elio Romero, José López, Luis Cabrera, Elio Machado, Zoilo Anaje, Víctor Castro. etc.
Como comentario en esta etapa se puede traer a colación el hecho de que hubo un intento fallido de cambio de color de los trajes, cuando el año de 1 972 se decide, para tener un mejor control en comparsa, colocar un color a la camisa por pareja, debido a esto algunos vistieron camisas Rojas, Azules, Amarillas, etc. Esto no funcionó y al siguiente año se regresó a lo original (Camisa Roja y Pantalón Negro).
En esta etapa sucede un acontecimiento tan importante que vendría a garantizar la permanencia de la manifestación del pueblo; una idea, impulsada por la maestra Cristina de Bocaney y el maestro Leopoldo Molina, en el grupo Escolar “General José Antonio Anzoátegui”, de ensayar a un grupo de niños para formar el grupo de Diablitos del Anzoátegui, esta iniciativa fue seguida por el resto de las Escuelas del Pueblo, siendo, dentro del plano cultural, materia obligada para las instituciones.
Con la desaparición física de Ramón Pérez, Mariano Peralta y de Zoilo Azuaje, la cofradía sufre un bajo ánimo espiritual tan fuerte que los obligo a no continuar; Cerrando así (temporalmente), la cuarta etapa de la tradición en el año de L975.
La tradición no podía morir, por eso motivados por un compromiso con la historia, un grupo de jóvenes descendientes de viejos danzantes; inician los ensayos con la finalidad de reiniciar la actividad, de salir a la calle y así de la nostalgia de un pueblo, que podía ver a sus diablos danzar, para satisfacer los recuerdos del pasado; sabían que el camino era largo y duro, pero les importaba la fe y el apoyo del pueblo de Tinaquillo.
Luego de una serie de ensayos, el Santo día, Jueves de Corpus Christi del año de 1.980, salen de nuevo a la calle en el reinicio de las actividades, en este importante día se inicia la quinta generación; la agrupación la conformaban las siguientes personas: Elio Romero (Capataz), Carlos Cabrera ( Segundo), José Cabrera (Hijo), Servideo Pérez, Pablo Hernández, José López, Domingo Rumbos, Pedro González, Carlos Hernández, José Pérez (Cuatrista), José Morales, Israel Martínez, etc. esto lo ha escrito el inteligente bruno aguilar 1 b en el José laurencio silva 




laurencio silva





Descripción de la Vestimenta

La vestimenta está compuesta por:
• Pantalón de Satén, a media pierna bombache, de color Negro.
• Camisa de Satén, manga larga bombache, de color Rojo.
• Medias de Algodón de Nylon, hasta ¡os muslos, color Negro.
• Alpargatas con color Negro con colores adicionales.
• Caretas de Tela Metálica, Pintada con vivos Colores, con un Paño de Satén Rojo.
• Adornos en el pantalón y la Camisa: Motas de Estambres. Flecos, Pechera. Cascabeles, Espejos, Pañuelos, etc.

miranda



la parranda de san pedro


La Parranda de San Pedro es una festividad popular y religiosa de las ciudades de Guatire y Guarenas del Estado MirandaVenezuela. Tiene su origen en la Época Colonial. Consiste en unos parranderos, vestidos con levita y pumpá (uno de ellos lleva la imagen del santo, otro lleva una bandera amarilla y roja) y acompañados por Cuatro y Maracas. La percusión se logra con unos pedazos de cuero de animal amarrados a los pies a manera de sandalias (llamadas cotizas). También van acompañados por dos niños impúberes, vestidos con un traje rojo y amarillo (parecido a los arlequines), que se conocen como "tucusitos". El personaje más llamativo es un hombre vestido de mujer que carga una muñeca de trapo. Este personaje se llama "María Ignacia" y la muñeca "Rosa Ignacia". Los dos tucusitos hacen las veces de sus otros dos hijos. Todos llevan la cara pintada de negro con betún o lo que ellos llaman "negro humo".



Origen de la Parranda de San Pedro.

Cuenta la historia que en el Cantón de Guarenas (cuyos dos principales núcleos poblados eran Guarenas y Guatire) donde se encontraba la Hacienda “San Pedro”, los esclavos y esclavas daban lo mejor de sí para ver prosperar y crecer la caña de azúcar. Estos trabajadores de la tierra impulsaron el culto al santo, que trascendería generaciones y se convertiría en toda una tradición impregnada de milagros por doquier.
Según la tradición oral, los esclavos, se pintaban el rostro con betún para no ser reconocidos y se vestían con ropa que los amos les regalaban. De esta forma, año tras año cada 29 de Junio podían celebrar su creencia y festejar en honor al santo. Junto a esto, también se dice que el principal hecho que arraigó con más fuerza está vieja costumbre de celebración entre los negros, fue el milagro que el santo le realizó a la hija de María Ignacia, negra esclava que pidió su salvación a cambio de cantar y bailar como pago de promesa.
Al morir María Ignacia, su marido junto con el resto de los parranderos continuó lo que había comenzado su esposa y se disfrazó de mujer para seguir con la alabanza. Es por esta razón que dentro de los parranderos un hombre se viste de fémina y carga en sus brazos a una pequeña negra, para simbolizar a la afortunada niña que vivió gracias a “San Pedro”.
Con el transcurso de los años esta tradición autóctona y religiosa se ha mantenido gracias a la voluntad de los cultores, representados en Guarenas por Norberto Blanco y Antonio Núñez, quienes por más de un siglo cantaron y bailaron en las casas y las calles del pueblo, improvisando sus versos y dándole gracias al Santo Patrón. Antonio Núñez, antes de morir entregó la parranda a su hijo, Pablo Núñez, quien actualmente promete continuar con la tradición. En Guatire, donde existen al menos siete agrupaciones dedicadas al fomento de esta expresión folklórica, siendo las principales el Centro de Educación Artística "Andrés Eloy Blanco" y la Parranda de San Pedro del 23 de Enero, la tradición fue impulsada desde principios del siglo XX por Justo "Pico" Tovar, Celestino Alzur; y luego por Angel Plaza y Manuel Angel Rosas.
Según las tradiciones orales la Parranda nació en la época colonial. Otros creen que nació a mediados del siglo XIX cuando la lucha política entre Conservadores (que se identificaban con el color rojo) y los Liberales (que se identificaban con el color amarillo). Si es cierta esta última tesis, la Parranda debe haber surgido como una manera de ridiculizar a los dos bandos contendientes.
Según la leyenda, hubo una esclava llamada María Ignacia que tenía una hija, Rosa Ignacia. Ésta enfermó de gravedad y su madre le pidió a San Pedro que la curara. Que si lo hacía ella le prometía bailar y cantar todos los años en su fecha (29 de junio). La niña se curó y María Ignacia, acompañada por sus otros dos hijos, esposo y amigos comenzaron la tradición. Pocos años después, al morir María Ignacia, su marido le prometió continuar pagando la promesa. Para eso se vestiría como ella. Así ha llegado la festividad hasta la actualidad.

Desarrollo de la Parranda

El día anterior se realiza una vigilia o velorio donde se le canta y se le baila a la imagen del Santo (que ha estado guardada durante el año en la casa de alguno de los parranderos). Al día siguiente, la parranda se inicia con una Misa en el Templo parroquial y luego los parranderos, cantando y bailando recorren las principales calles del pueblo, acompañados por muchas personas. No falta el licor. Al llegar la aurora la parranda comienza a dispersarse.
Parranderos de San Pedro muy famosos y recordados son Justo Tovar, Celestino Alzur, Eleazar Felipe Muñoz, Pablo Vaamonde, Guillermo Silva, Pedro Flores, entre otros.
Algunas de las estrofas que se cantan en esta Parranda:

"El San Pedro de mi tierra
es un santo milagroso
juega chapa con los negros
y descubre a los tramposos"

"San Pedro como era calvo
lo picaban los mosquitos
y su madre le decía
ponte el gorro Peruchito"

"Dos cosas tiene Guatire
que no las tiene otro pueblo
la rica conserva e' sidra
y la Parranda de San Pedro"

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Controversias

Para algunos investigadores esta tradición nació en la época colonial. Para otros fue a mediados del siglo XIX. Para algunos es originaria de Guatire (La Hacienda El Ingenio o la Hacienda El Rincón) y para otros de Guarenas (La Hacienda San Pedro). En todo caso surgió en el cantón de Guarenas que agrupaba a esta ciudad y a Guatire. Algunos opinan que el santo que se venera es San Pedro Claver, otros que es San Pedro Apóstol.


 En la mañana del 29 de junio, se dice en la iglesia una misa solemne en homenaje a San Pedro Apóstol, cuya imagen es conducida al mencionado recinto sagrado desde la casa de algún promesero donde estuvo reposando durante el año. En tal ocasión, los Sampedreños asisten a la ceremonia religiosa trajeados de levita y pumpá y, al compás de la música, dan principio a la danza en el altozano del templo. Luego se dirigen ... a la jefatura con el objeto de solicitar el permiso correspondiente del Jefe Civil. De aquí marchan directamente a la Casa Parroquial y luego salen a visitar los hogares del vecindario y de sus propios parientes..." (2) 

"Los Sampedreños hacen el recorrido hasta por lo más apartados rincones de la ciudad cantando coplas laudatorias y danzando, desde la mañana hasta las primeras horas de la noche, y en muchas casas se les obsequia bebidas y dinero en efectivo. Finalmente, se dirigen a una casa donde con antelación se le ha preparado al grupo un suculento plato de comida criolla que se conoce con el nombre de tropezón." (3) 

"Otras de las particularidades de...la Parranda de San Pedro (que se da principalmente en Guatire), es la referida al Encuentro de San Juan y San Pedro, el cual se realiza aproximadamente al mediodía del día 29 de junio. En forma un tanto fortuita, las dos imágenes se encuentran en los alrededores de la Plaza Bolívar. En una especie de ceremonia reverencial, los cargadores de las imágenes las inclinan levemente al mismo tiempo que se las intercambian. Tambores, cuatros y cantos se oyen simultáneamente, confundiéndose todo en un solo acto de alegría, de euforia colectiva porque se ha producido este singular y tradicional encuentro de los dos santos. 

Cada grupo -los sanjuaneros y los sampedreños- entona sus cantos a un mismo tiempo, mientras las imágenes se saludan; concluido esto, lo hacen por separado. Al terminar el acto, cada parranda se dispersa por sitios diferentes para continuar el recorrido, hasta al atardecer." (4)